Este informe del ingeniero Marcelo Canatella muestra cómo fue el año climático y su incidencia en la viticultura local y de otras regiones de Argentina.
Si bien la situación del clima en los diferentes oasis productivos de la provincia de Mendoza ha tenido, durante la temporada 2020-2021, bastantes similitudes y algunas diferencias en lo que respecta a precipitaciones, el siguiente informe pone su foco en las regiones productivas de Agrelo, Compuertas, Vistalba y sobre todo, el Valle de Uco.
El mes de abril de 2020, se presentó con escasas precipitaciones y ausencia de heladas tempranas “severas”. Por este motivo, los viñedos en general no iniciaron su reposo invernal, manteniendo hojas activas lo que aseguró una buena acumulación de reservas durante la post cosecha que se vio reflejado en la buena brotación de la primavera.
A partir del 6 de mayo ocurrieron las primeras heladas severas en gran parte de la provincia, hecho que provocó la caída total de hojas y el inicio del reposo invernal.
Los meses de junio y julio se presentaron con fríos intensos, nevadas puntuales en algunas partes altas del Valle de Uco y Luján de cuyo. Además, hacia fin de julio hubo importantes nevadas en cordillera con gran acumulación nívea.
El mes de agosto, se presentó muy frío y seco, con ausencia de precipitaciones y presencia de temperaturas muy bajas.
El mes de septiembre fue extremadamente seco, con escasas precipitaciones.
Octubre fue un mes con mucha variabilidad en el estado del tiempo. En general, se presentó extremadamente seco, sin registros de precipitaciones en las estaciones meteorológicas de Colonia Las Rosas (Tunuyán), ni Belasco de Baquedano (Perdriel) donde el registro fue de 0,6 mm.
El evento climatológico más importante del mes de octubre fue una helada general que afectó gran parte de la Patagonia, Mendoza (en sus tres oasis productivos) y la provincia de La Pampa. Este fenómeno ocurrió el día lunes 5 de octubre.
La previa de un evento climatológico severo
Entre el 29 y 30 de septiembre, ingresó una masa de aire caliente/seco, acompañado de viento Zonda en cordillera, que finalmente descendió al “llano”, registrando temperaturas superiores a 30ºC.
El 2 de octubre, ingresó un frente frío húmedo, produciendo un marcado descenso de temperatura, con precipitaciones tenues que si bien no alcanzaron a acumular agua en los pluviómetros, elevaron la humedad.
Los días 3 y 4 de octubre, las temperaturas máximas diurnas rondaron los 10º centígrados y mínimas nocturnas los 2º centígrados.
La madrugada del 5 de octubre, el cielo se despejó completamente alrededor de las 4.00 AM, promoviendo un marcado descenso de temperatura, con la ocurrencia de heladas que oscilaron entre -1,5 y -6 º centígrados.
En Patagonia, según las zonas productivas, se registraron temperaturas mínimas entre -2,5 ° centígrados (Alto Valle) hasta -7° centígrados (Valle Medio).
Para el caso de Mendoza, se registraron temperaturas entre -2 y -5 ° centígrados según la zona.
Consecuencias en el viñedo
En relación con el estado fenológico en el que se encontraban los viñedos, había variedades que estaban sin brotar, pero con yemas hinchadas; otras con 5 cm y con brotes y en algunas regiones, había variedades con crecimientos superiores a los de 15 centímetros.
En relación a las consecuencias de la helada, se observaron daños directos tanto en puntas de brotes como en brotes enteros, en variedades de brotación temprana (Chardonnay, Pinot, Sauvignon Blanc, y algunos Malbec de regiones más cálidas). Estos daños impactaron negativamente en las producciones de la cosecha 2021 en la zona Este de Mendoza y algunos sectores puntuales del Valle de Uco.
También pudo observarse al momento de la cosecha una afectación en el cuaje del Malbec y algunas variedades tintas tardías.
¿Cómo continuó la marcha climática?
Noviembre se caracterizó por su elevada humedad y temperaturas moderadas. Se registraron precipitaciones acompañadas de granizo en varias zonas productivas de la Provincia, provocando inundaciones en la capital mendocina.
Particularmente, el 13 de noviembre una tormenta de granizo afectó algunas fincas de la zona de Gualtallary, Los Árboles, Agua Amarga y otras regiones productivas de la zona alta del Valle de Uco. Como consecuencia, hubo daños en las canopias y en los racimos que se encontraban entre grano pimienta y grano arveja, de acuerdo a la variedad y a la zona productiva.
El mes de diciembre se presentó extremadamente seco, con temperaturas máximas bastantes elevadas, pero dentro de las medias normales para momento del año.
Enero se presentó con bastante variabilidad en el estado del tiempo, con una primera quincena húmeda y fresca, donde se alcanzaron precipitaciones cercanas a los 60 milímetros, y una segunda quincena seca y cálida hasta fin de mes donde comenzaron las precipitaciones y la humedad que se extendió durante todo febrero y parte de marzo.
Como dato climatológico importante el día 4 de enero de 2021 ocurrió una granizada que afectó gran parte de la zona de Chacayes, produciendo daños cercanos al 40 % en varias fincas de la zona.
Después de la tormenta del 4 de enero se produjeron lluvias de diferente intensidad. Sin embargo, el calor y sequedad que hubo en la segunda quincena del mes y hasta el 27 de enero permitió una cicatrización rápida de los daños producidos en racimos y una recuperación bastante importante de la canopia.
Febrero, se presentó con alta frecuencia e intensidad de precipitaciones en los tres oasis productivos de la Provincia de Mendoza.
Según los registros de las diferentes estaciones meteorológicas se acumularon entre 160 mm y 200 milímetros (según las distintas zonas productivas) entre el 27 de enero y el 28 de febrero de 2021.
Las lluvias ocasionaron daños de gravedad en algunos sectores de la Provincia, colapsando uno de los puentes que une el Valle de Uco con la capital de Mendoza; e incluso destruyendo un viñedo de la zona de Ugarteche.
En la madrugada del 17 de febrero se registraron tormentas de granizo de mediana intensidad y corta duración en varias zonas productivas del Vale de Uco.
El mes de marzo siguió con alta frecuencia e intensidad de precipitaciones en los tres oasis productivos de la Provincia de Mendoza, durante las primeras tres semanas del mes.
Las precipitaciones alcanzaron entre 45 y 70 milímetro en las diferentes regiones productivas de la provincia.
En general, estas precipitaciones no afectaron cualitativamente el estado sanitario de la uva (salvo algunos ataques puntuales de Botritis en Chardonnay, Pinot y Sauvignon Blanc), lográndose una alta calidad enológica de las variedades tempranas.
El principal problema de las lluvias es que obligaron a acelerar las cosechas en todas las fincas, complicando la logística general de camiones y personal de cosecha.
La semana final del mes de marzo y la primera semana de abril se caracterizó por tener temperaturas medias normales para la época, con baja humedad relativa, sin precipitaciones y con gran amplitud térmica, sobre todo en las zonas productivas de mayor altitud.
Estas condiciones han permitido lograr una excelente maduración polifenólica de las variedades tintas de maduración media y tardía.
No se han observado tampoco problemas sanitarios graves en las variedades tintas, más allá de alguna complicación puntual causada por botritis.
Este informe fue redactado por el ingeniero Marcelo Canatella.
