Temporada 2022/2023.
Por Marcelo Canatella
¿Cómo fue el escenario agroclimático durante el ciclo 2022-2023? En el siguiente reporte se presentan los principales datos de las condiciones climáticas que afectaron a la viticultura de Mendoza durante la temporada que acaba de concluir. Temperaturas, precipitaciones y otras contingencias son evaluadas en función de su impacto en los viñedos. El informe consigna eventos comunes sucedidos en los diferentes oasis productivos de la provincia, con un mayor foco en las zonas del Valle de Uco.
Los datos, mes a mes
- ABRIL 2022: se presentó extremadamente seco. Gran parte de los viñedos de la provincia sufrieron un evento de bajas temperaturas el día 30 de marzo. En la mayoría de los casos dicha helada no fue severa, pero los viñedos comenzaron a entregarse durante el mes de abril, algo más temprano que lo habitual.
- MAYO 2022: fue frío y seco, con escasa presencia de precipitaciones. En la segunda quincena se registraron temperaturas medias más bajas que el promedio anual. También hubo heladas generales todos los días de la quincena. En algunas zonas altas del Valle de Uco se registraron temperaturas cercanas a los -10°C.

- JUNIO 2022: durante todo el mes las temperaturas fueron bajas, dentro del promedio anual. Entre los días 21 y 26 de junio, ingresó un frente frío húmedo; registrando temperaturas máximas que no superaron los 8 °C. En algunas zonas alta del Valle de Uco hubo precipitaciones en forma de “aguanieve”, sin acumulación de nieve.
- JULIO 2022: fue frío y húmedo, con presencia de importantes heladas durante gran parte del mes. La madrugada del 15 de julio, ingresó un frente frío húmedo en toda la Provincia de Mendoza, que precipitó en forma de nieve en el Gran Mendoza y Valle de Uco. En las fincas de la parte alta de Tupungato se acumularon hasta 20 cm de nieve, que se mantuvieron durante algunos días. Es importante mencionar que la precipitación nívea en dicha época, es fundamental en la provisión de agua para el resto de la temporada.

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- OCTUBRE 2022: Sin duda alguna, el evento que marcará la temporada vitivinícola 22 – 23, fueron las heladas tardías que se produjeron en los últimos días de octubre. Durante la madrugada del lunes 31 de octubre y el martes 1 de noviembre, la mayor parte de las zonas vitivinícolas del país soportaron temperaturas por debajo o cercanas a 0°C durante un tiempo variable que fue de unos minutos a varias horas. Como antecedente de este evento, el sábado 29 de octubre, se produjeron elevadas temperaturas, con ráfagas de viento “zonda” que ingresaban desde la Cordillera de los Andes, manteniendo las temperaturas medias elevadas durante el transcurso del día. El domingo 30 descendió la temperatura y se mantuvo nublado y frío. La madrugada del 31 de octubre, los puntos de rocío rondaban entre -6° y -3°C. A partir de las 3 AM, se despejó completamente, promoviendo un marcado descenso de temperaturas con heladas en diferentes puntos del Valle de Uco. El transcurso del lunes se presentó fresco (temperaturas que no superaron los 17°C), con permanente circulación de aire. La madrugada del martes 1 de noviembre, el cielo se mantuvo completamente despejado, promoviendo un descenso de temperaturas mínimas que descendieron entre 0° a -4,5°C según los registros de las distintas estaciones meteorológicas. Es importante mencionar, que ambas heladas fueron generales y afectaron las distintas zonas vitivinícolas del país, con importantes pérdidas de uva en todo el país. Terminada la cosecha se estima que la pérdida ha rondado entre el 30 y 40 % de la producción nacional. Los mayores daños se observaron en la mayoría de los sectores productivos del Valle de Uco, Agrelo, Perdriel, Ugarteche, Vistalba y gran parte del Este de Mendoza. Las bajas temperaturas afectaron también viñedos en Neuquén, Córdoba, San Juan, La Rioja, Catamarca, Salta y Jujuy.
Compartimos algunas notas de prensa que pusieron en evidencia la gravedad de este fenómeno.
https://www.thedrinksbusiness.com/2022/11/mendoza-declares-emergency-after-late-season-frost/
https://www.mendozapost.com/sociedad/helada-mendoza-productores-valle-de-uco/

- NOVIEMBRE 2022: se presentó con elevadas temperaturas y gran inestabilidad. Se registraron varias precipitaciones. Entre las cuatro más importantes se llegaron a acumular cerca de 60 mm en las diferentes zonas.
- DICIEMBRE 2022: se presentó, en general, con elevadas temperaturas y seco. Sin embargo, hubo dos eventos meteorológicos de relevancia. Por un lado, una tormenta de granizo de alta magnitud que afectó gran parte del Valle de Uco, sobre todo Vistaflores, Chacayes, Los Árboles y algunos sectores menores de Altamira y La Consulta. Por otro lado, a partir del 23 de diciembre comenzó el ingreso de un frente frío y húmedo registrándose precipitaciones que acumularon entre 17 y 50 mm según los pluviómetros de diferentes fincas del Valle de Uco.
- ENERO 2023: se presentó con elevadas temperaturas e inestabilidad climática, registrándose algunos episodios de tormentas que afectaron varios sectores productivos de la Provincia.
- FEBRERO 2023: fue un mes cálido y seco. Las temperaturas promedio fueron muy superiores a los promedios histórico. Se caracterizó por presentar varias olas de calor (3 o más días con temperaturas mínimas por encima de 20°C) y hacia el 18 de febrero, el ingreso de un frente frío, hizo que se produjeran mínimas por debajo de 0° en varias zonas productivas de la provincia.
- MARZO 2023: Durante el transcurso de los primeros días continuaron las temperaturas elevadas y la ausencia de precipitaciones. A partir del 15 de marzo bajó la temperatura media y comenzaron a registrarse precipitaciones cada 2 o 3 días, lo que hizo que la madurez azucarina se frenara respecto a las semanas anteriores y se lograra una mayor madurez polifenólica en variedades tintas.

¿Cómo podemos caracterizar a la añada 2023?
Sin dudas, la temporada 2022-2023 fue una temporada extrema y extraordinaria, iniciando el ciclo con dos eventos de heladas tardías los días 31 de octubre y 1 de noviembre que afectaron severamente las producciones de 3 oasis productivos de la Provincia de Mendoza y al resto de zonas vitivinícolas del País. Los rendimientos generales fueron un 30 a 40 % menor al promedio según las distintas regiones y variedades.
Vale destacar que el transcurso de la primavera fue frío (con temperaturas medias por debajo del promedio histórico); sumado a varias tormentas de granizo registradas durante diciembre y enero, contingencias que continuaron reduciendo las producciones vitivinícolas de los diferentes oasis vitivinícolas.
Febrero registró temperaturas medias elevadas respecto al histórico y posteriormente, el 18 de febrero se produjo un drástico descenso de temperatura registrando heladas (de hasta -2,5°C) en distintos sectores del Valle de Uco. Esta helada temprana, fue histórica, sin observarse registros de temperaturas por debajo de 0°C, desde febrero del año 1961.
Las características climáticas mencionadas, aceleraron el proceso de madurez azucarina, obligando a apresurar firmemente la marcha de la cosecha, aunque la madurez polifenólica no fuese la adecuada. Hubo una superposición en la madurez azucarina en los diferentes varietales, sobre todo a fin de febrero y principio de marzo.
Posteriormente y con las bajas temperaturas y lluvias de la segunda quincena de marzo, se produjo una parada de la evolución de los grados Brixs y un aumento de la madurez polifenólica.
Prácticamente la totalidad de las bodegas, culminaron la vendimia durante el mes de marzo, otro hecho de carácter inusual.
El resultado de la vendimia fue una sanidad extraordinaria en las uvas, muy buena acidez natural (ayudada por la cosecha temprana) y gran expresión aromática.