6 tareas en el viñedo.
Hacia el final del invierno y previo a la brotación de los viñedos es un tiempo clave para realizar ciertas tareas culturales, con el objetivo de promover que la vid brote de manera pareja y homogénea.
Estas labores es conveniente programarlas después de la poda, la atadura y el mantenimiento de estructuras y antes del inicio de la tarea de desbrote.

¿Cuáles son las tareas vitícolas más importantes antes de la brotación?
1. Riegos para carga de perfil:
Una vez terminada la poda y la atadura es aconsejable dar un riego pesado (cuando se riega por superficie) o entre 2 y 3 riegos de no menos de 15 horas cuando es por goteo, con el objetivo de:
– Promover el crecimiento radicular. Teniendo en cuenta que en el periodo previo a la brotación se genera el primer pico de crecimiento radicular.
– Cargar el perfil para evitar daños por heladas primaverales. Las últimas heladas del invierno, que en determinadas zonas del Hemisferio Sur pueden ocurrir hasta principios de diciembre, producen daños importantes en la producción y calidad de la futura cosecha. Uno de los métodos de lucha pasiva más utilizados es mantener el suelo húmedo para atenuar las bajas temperaturas.
– Favorecer una brotación homogénea. A través del lloro que se da con el aumento de la temperatura del suelo y el aumento de humedad del mismo, se desarrolla la actividad radicular con la producción de hormonas que favorecen la brotación. Además, ocurre el lavado de inhibidores de la brotación.

2. Fertilización de primavera:
Si bien es recomendable fertilizar con fertilizantes Nitrogenado, a partir de 10 centímetros de brotes (antes las plantas utilizan la reserva para el crecimiento de los mismos), se puede realizar fertilizaciones con Fósforo o Potasio durante los primeros riegos de la temporada.
Las cantidades dependerán de la disponibilidad de dichos elementos en el suelo y de las dosis que se hayan utilizado en post cosecha.
3. Incorporación de verdeos:
Previo a la brotación y al inicio del periodo del riesgo de heladas primaverales, se debe proceder a incorporar los verdeos invernales que fueron sembrados en otoño.
Esta tarea se puede realizar con rastra o múltiple de manera de trozarlos e incorporarlos al suelo o simplemente segándolos con desmalezadora, de modo, que los restos queden sobre la superficie del camellón. En ambos el caso de que esta tarea se haga con rastra o múltiple se incorporan también al suelo los restos de poda.

4. Limpieza de los sistemas de riego presurizados:
En caso que no se haya realizado esta tarea en post cosecha, se deben aprovechar los meses de agosto y setiembre para realizar la limpieza en blanco de los laterales y también la inyección de hipoclorito para limpieza de restos orgánicos y de ácido para la remoción de sales.
Es aconsejable también la calibración y regulación de válvulas a campo para lograr una buena uniformidad de los riegos presurizados con un alto coeficiente de uniformidad.
5. Control de hormigas:
Previo a la brotación se debe proceder al control de hormigas. Esta tarea se puede realizar puntualmente en hormigueros. Se debe tener en cuenta que con el aumento de temperatura comienza la actividad de estos insectos.

6. Control de malezas en la línea de plantación:
Con los primeros riegos de la temporada y con el aumento de la temperatura, comienza el nacimiento de malezas en la línea de plantación.
Es conveniente realizar el control de las mismas previo a la brotación, para evitar competencia por agua y fertilizantes con la planta y como lucha pasiva contra el riesgo de heladas.
El control puede realizarse con herbicida en viñedos convencionales o con métodos mecánicos en los viñedos orgánicos.
